YUNEL ESCOBAR
Un primer bate ideal en Toronto
Un primer bate ideal en Toronto
Con mayor paciencia en el plato se ha ganado ese puesto con los Azulejos
El torpedero cubano de los Azulejos de Toronto Yunel Escobar batea en un juego de pretemporada contra los Bravos de Atlanta en Dunedin, Florida, el pasado 24 de marzo.
LUIS E. RANGEL
ENH
DUNEDIN, Florida -- La paciencia pagó dividendos para Yunel Escobar.
El torpedero cubano vivió en el 2011 una campaña en la que dejó atrás la agresividad de su madero y se volvió más selectivo en el plato, un hecho que no pasó por debajo de la mesa por los Azulejos de Toronto, que le extendieron un contrato de dos años por $10 millones.
Como primer bate, Escobar terminó recibiendo 3.71 envíos por aparición al plato, el número más alto en su carrera y el más elevado entre sus compatriotas cubanos.
“El mánager y el gerente general me dicen que soy uno de los peloteros que más me embaso, y que tengo un porcentaje de embasamiento (OBP) bueno y eso es lo que ayuda al equipo como primer bate, porque soy uno de los más pacientes en el juego”, señaló Escobar en el clubhouse del Florida Auto Exchange Stadium de esta localidad.
El toletero derecho negoció 61 bases por bola en la pasada campaña, cifra tope en su trayectoria en la gran carpa, lo que le permitió concluir con un OBP de .369, el más elevado entre los campocortos de la Liga Americana.
Fue a principios de mayo de la pasada temporada cuando el destino de Escobar cambió, después de que el abridor de la alineación del mánager John Farrell, Rajai Davis fuera colocado como último bate por su discreta producción. Pese a que promediaba sólo .252, el antillano pasó al primer turno y desde entonces no ha parado de embasarse.
Para el 2012 Farrell quiere aplicar la misma receta.
“En Cuba nunca fui primer bate. Fui segundo. Con los Bravos (de Atlanta) lo ocupé un tiempo bien corto, pero nunca en forma constante como ahora. Los Azulejos confían en que sea primer bate y yo me siento bien ahí”, confesó.
Y con el objetivo de seguir sintiéndose bien como primer turno, y en parte al aliciente de su nuevo contrato, Escobar se enfocó en el receso de campaña en una sólida preparación física, quizás la más intensa que ha hecho desde que llegó a las Grandes Ligas.
“Fue una preparación de gran calibre. Tengo la carga todavía arriba. Me siento fuerte y el juego mío es más rápido. Llegué pesando entre 216 y 218 libras y quiero empezar la temporada con 212. Lo fundamental es estar preparado para toda la campaña”, aseveró Escobar, a quien se le nota mayor masa muscular.
Para el habanero, esa mayor corpulencia, no será obstáculo en su desempeño defensivo. De hecho, de sus palabras se desprende que para el 2012 pudiera tener un mejor año con el guante en un 2011 que califica de positivo.
“Creo que fue un año donde mejor defensa tuve, tomando en cuenta que tuve que adaptarme a un terreno sintético (el Rogers Centre de Canadá), luego de venir jugando en grama natural (Turner Field de Atlanta) donde la bola llega más rápido. Fue un año donde hice 14 errores, nada mal, sobre todo cuando los que ganan el Guante de 0ro cometen unos ocho más o menos”, analizó.
Siga a Luis E. Rangel en Twitter: @luirangel
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